miércoles, 19 de enero de 2011
Pequeñas y grandes miserias de los grandes y pequeños filósofos: John Locke
Además de recomendar a los padres acaudalados un preceptor privado y doméstico para sus vástagos -que las escuelas están infestadas de vicios y groserías-, Locke en su Ensayo sobre la ley de los pobres se lamenta de que "los hijos de los trabajadores son normalmente una carga para la parroquia, y por lo general son mantenidos en inactividad, con lo que también se pierde parte de su trabajo hasta que tienen 12 o 14 años de edad", debido a lo cual sugiere que se establezcan "escuelas de trabajo" para los niños pobres en cada parroquia de Inglaterra, con el fin de que "desde la infancia [tres años] conozcan el trabajo." Incluso llegó a esbozar los aspectos económicos de estas escuelas, argumentando no sólo que serían rentables para la parroquia, sino también que inculcarían una buena ética de trabajo en los infortunados niños, según leo en wikipedia. Agárrate con el liberalismo ya en sus inicios...
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario