Que el viernes es el mejor día de la semana Dios mismo lo apoyaría cabalmente. Dicen que no hay nada más feliz que la víspera, al menos en el reino de este mundo. Por eso debe crecer y multiplicarse, hasta el Juicio Final y más allá. Repartamos trabajo y que nos sustituyan los viernes en merma de nuestro sueldo si es preciso. Y con extras para los voluntarios-forzosos, qué menos. Al fin y al cabo, nadie es imprescindible, ni siquiera Dios habiendo rock´n´roll. El jueves dejaría de estar siempre molestando en el puñetero medio para mutarse en juernes, víspera de víspera, la repanocha. De todos modos en Madrid ya lo practicamos, pero con mala conciencia. Para la jubilación contaría igual la semana corta, naturalmente, e inspirándonos precisamente en los jubiletas otro día hablaremos del "lundingo", pero vayamos por partes. El "mierdoles" no tiene remedio, pues, como decían Tip y Coll, está siempre en la mitad de la semana del pobre. Pero siempre nos quedarán los "martados", que saltan con pértiga. En fin, como la próxima vamos a probar un juernes legal, saborearemos el fruto de la siguiente revolución antes de producirse, algo inédito en la historia. No permitamos que los ingleses o los ricos vuelvan a adelantársenos en materia de avances civilizatorios, ya que tan bien se las maravillan con los incivilizatorios... (Gracias, Sergio)
viernes, 22 de enero de 2010
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este me ha gustado , he de reconocerlo
ResponderEliminarya sé que te la toca que guste o no
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En absoluto. Para eso se hace. Graaaacias.
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